Las minihidros son una de las fuentes de energías renovables no convencionales (ERNC) más competitivas, eficientes y consolidadas en nuestro país.
01. Las minihidros son confiables
Son una tecnología
probada:
Las minihidros usan una tecnología que tiene más de 200 años en operación a escala global y pueden lograr una vida útil de al menos 40 años. Solo en Europa hay 14 mil pequeñas centrales hidroeléctricas en funcionamiento.
Dan seguridad de abastecimiento:
Son una fuente de energía muy segura ante catástrofes naturales y, por estar distribuidas a lo largo del territorio, mejoran significativamente la resiliencia del sistema, debido a que inyectan electricidad en múltiples puntos usando distintas líneas de transmisión.
Se basan en un recurso natural renovable y abundante en Chile:
Es una energía nuestra, lo que resulta muy importante, desde un punto de vista geopolítico, para nuestra autonomía energética.
Producen energía
continua:
La generación a base de las minihidros es constante y predecible a lo largo del año, debido a que la hidrología es pareja durante las cuatro estaciones y con fluctuaciones naturales entre invierno y verano.
02. Las minihidros son sostenibles
Inciden positivamente en otras actividades económicas:
Las minihidros representan un gran avance para la agricultura nacional, con diversos beneficios asociados, como ingresos adicionales para asociaciones de canalistas y disponibilidad de energía para pasar a riego tecnificado y usar eficientemente el recurso agua.
Reducen la migración
campo-ciudad:
Por estar ubicadas en zonas rurales, muchas veces precordilleranas, las minihidros llevan oportunidades de desarrollo económico y mejoras en la calidad de vida a sectores amenazados por la migración campo-ciudad. La construcción de minihidros implica generación de empleos directos e indirectos, temporales y definitivos, que contribuyen a desarrollar el lugar donde se emplazan.
Son sustentables y con emisiones menores:
Las minihidros tienen un mínimo impacto ambiental, ya que pueden operar como centrales de pasada funcionando en base al flujo normal del agua. No es necesario inundar grandes cantidades de terreno ni regular el caudal, lo que evita pulsaciones artificiales en el cauce y, además, el agua es devuelta en las mismas condiciones a su cauce natural. También, desplaza la generación de energía proveniente de fuentes más emisoras de CO2, lo que contribuye a limpiar la matriz energética.
Promueven la eficiencia
energética:
Debido a su cercanía con los centros de consumo, las minihidros producen menores pérdidas de energía durante su transmisión, contribuyendo a uno de los principales objetivos de la eficiencia energética, que es reducir dichas pérdidas.
Mayor conocimiento de nuestros cauces naturales:
La multiplicación de las minihidros a lo largo de Chile, permitirá cada vez más, disponer de información valiosa sobre nuestras cuencas y cauces, lo que se traducirá en mejores medidas de conservación de especies animales y vegetales amenazadas.
03. Las minihidros son escalables
Son una fuente de energía competitiva:
Las minihidros son una de las fuentes de energías renovables no convencionales (ERNC) más competitivas, eficientes y consolidadas en nuestro país.
Producen desarrollo a lo largo y ancho de Chile:
Por estar alejadas de la Ruta 5 y del sistema de transmisión troncal, las minihidros mejoran la infraestructura de subtransmisión hacia el interior de valles, lo que permite entregarle energía a emprendimientos industriales en zonas aisladas, generando polos de desarrollo local. Es posible desarrollar minihidros a lo largo de todo Chile, ya que su potencial se encuentra distribuido en distintas zonas.
Producen desconcentración de la industria:
Permiten el ingreso de nuevos actores a la industria, fomentando la competitividad y el desarrollo de pymes de energía, tanto chilenas como extranjeras.
Aumentan la inversión en Chile:
La inversión que se está haciendo actualmente en el sector minihidro –cercana a los 700 millones de dólares- es comparable con muchas industrias ya consolidadas en nuestro país, y presenta un gran potencial de crecimiento económico, estimado en más de 10.000 MW.